Es un sistema de desarrollo y expresión de la identidad, que conjuga el arte, la ciencia y el amor, mediante el descubrimiento, activación y expresión de los potenciales genéticos, favoreciendo la integración y desarrollo ontológico del ser, a partir de la inducción de vivencias integradoras, cenestésicas y afectivas. Biodanza es un sistema de integración afectiva, pues restablece la unidad entre el hombre y la naturaleza mediante vivencias integradoras de carácter afectivo, que activan los centros reguladores límbico hipotalámicos e influyen sobre los instintos, las vivencias, los sentimientos y la existencia misma, permitiendo adquirir una mejor calidad de vida para las personas, las organizaciones y la sociedad. Es un sistema de renovación orgánica, al promover la autorregulación de las funciones biológicas y los procesos de reparación celular, así como la disminución de los factores de desorganización y estrés, mediante estados de trance. Biodanza promueve la integración visceral, orgánica, mental, social y existencial, mediante la estructura:
Las personas desarrollan, en el curso de sus vidas todas estas cinco funciones fundamentales. Muchos, sin embargo, refuerzan unas en detrimento de otras. La Biodanza trabaja, estimulando las funciones poco desarrolladas para después integrarlas y armonizarlas entre sí.